El Paraíso Fiscal de los Fondos de Inversión en España

Paraíso Fiscal
Paraíso Fiscal – Foto – money.cnn.com

Durante la feria para start-ups 4YFN a la que asistimos la semana pasada, expusimos en una de las mesas redondas en las que participamos, nuestro punto de vista sobre los cambios a realizar en la industria de fondos de inversión en España. ¡Tuvimos un poco la sensación de ser unos soñadores quijotes financieros tratando de ayudar caballerosamente a pequeños inversores! A continuación os lo explicamos para que nos deis vuestra opinión de primera mano a través del blog.

A principios de este siglo, siendo Rodrigo Rato Ministro de Economía, se modificó la fiscalidad de los fondos de inversión para facilitar los traspasos, eximiéndolos de cualquier tipo de comisión. Es decir, cuando un inversor decide traspasar su inversión de un fondo a otro, no tiene que pagar ningún tipo de impuesto sobre la plusvalía. Esta característica tan particular y única del sistema de fondos de inversión español pretendía aumentar la competencia en el sector y facilitar los procesos de rebalanceamiento entre los distintos tipos de activos de los clientes. Desgraciadamente, en nuestra opinión, los resultados obtenidos han sido prácticamente los contrarios y además han ocasionado unos graves efectos colaterales.

El primer efecto colateral de esta medida la sufren directamente los pequeños inversores. El sistema creado, al ofrecer traspasos gratuitos, operativa y fiscalmente, ha provocado en los clientes una invitación a salir y entrar de los mercados de forma muy activa. Para los inversores minoristas dichas actividades suponen un gran riesgo ya que, como se ha demostrado repetidas veces, tienden a vender barato y comprar caro. Una fiscalidad de traspasos más en línea con el resto del mundo invitaría a los clientes a invertir con más visión de largo plazo reduciendo el número de transacciones. Además, las instituciones financieras no cobran por los traspasos, pero esto no quiere decir que las operaciones no tengan un coste para las mismas. Los traspasos suben los costes de operativa de las instituciones, que pasan la factura a los inversores mediante otro tipo de comisiones. Al final, tanto los inversores que hacen muchos traspasos como los que no, están pagando por la operativa extra.

El segundo efecto colateral de esta medida beneficia a los inversores con más capital y más medios. Invertir no debe ser una herramienta para pagar menos impuestos. Para vivir en el estado de bienestar, todos debemos contribuir y este cambio de fiscalidad hace que los clientes de Banca Privada, sobre todo, paguen menos impuestos. Esto lo consiguen de varias maneras.

En primer lugar, los clientes de Banca Privada tienen un mayor número de fondos con los que ¨jugar¨ a traspasar capital, y además los gestores de este segmento disponen de sofisticados sistemas de simulación para minimizar la fiscalidad de sus clientes. Si el cliente necesita reembolsar para afrontar un pago, su gestor siempre va a intentar que lo haga de una manera que no tenga que pagar impuestos. Las gestoras y distribuidores, al jugar artificialmente con los traspasos para rejuvenecer las participaciones antiguas con mayores plusvalías, logran que los clientes paguen menos impuestos al realizar reembolsos.

En segundo lugar, en España se ha creado un auténtico paraíso fiscal de los fondos de inversión. Jugando con los traspasos y beneficiándose de la llamada plusvalía del muerto, el inversor español en fondos de inversión puede llegar a traspasar todos sus fondos a sus herederos con exención total de impuestos sobre plusvalías. Es decir, especialmente para los grandes patrimonios gestionados con eficiencia fiscal, los fondos de inversión son un instrumento que permite terminar no pagando impuestos nunca. Un auténtico paraíso fiscal sin tener que irse a Panamá.

Sin embargo, la incoherencia está en que Hacienda impuso hace unos años unas tasas fiscales crecientes en función de la cuantía de la plusvalía total anual. Esto no tiene sentido, ya que se recauda menos cuando parece que interesa recaudar más, y además, como ya mencioné, pone en desventaja al inversor pequeño. Asimismo, se malgastan recursos humanos y tecnológicos para simplemente reducir el pago de impuestos, en lugar de dedicarlos a mejorar el servicio y la atención al cliente.

Además de los problemas ya mencionados, el procedimiento tiene defectos operativos graves. Cuando los clientes efectúan reembolsos definitivos, ni los bancos ni las gestoras son capaces de explicar cómo se calculan en detalle los impuestos sobre plusvalías que deben pagar. El dato que se archiva cada vez que hay un traspaso es el de “la mochila” fiscal de cada participación del fondo. Por ello, el banco nos informa de los impuestos a pagar cuando hacemos un reembolso. Sin embargo, no se archiva el historial de cuál fue el traspaso que generó cada plusvalía. Es decir, el banco no puede darnos el detalle de cada sumando de la factura fiscal. Evidentemente, esto es una bomba de relojería que estallará en cualquier momento y generará un número infinito de reclamaciones. Supongo que este es el motivo fundamental por el que esta medida solo existe en España, que sepamos nosotros.

Por último, este cambio ha creado barreras fiscales a la competencia europea y ha aumentado los costes operativos. Por ejemplo, a principios de siglo, Vanguard, la gestora estadounidense de fondos indexados, desembarcó en Europa registrando sus fondos en Irlanda. Con una estrategia paneuropea y con unas bajísimas comisiones de gestión Vanguard se encontró que sus fondos no tenían ventajas fiscales en España al no estar registrados en nuestro país. Posiblemente esta fue la razón de que los dejara de distribuir en España en 2009. Finalmente, en 2015 Vanguard ha decidido registrar sus fondos en España, posiblemente para beneficiarse de esta ventaja fiscal.

Desde OpSeeker pensamos que los fondos de inversión son un instrumento muy importante para mejorar la salud financiera de los inversores españoles. Por ello creemos que es necesario seguir avanzando en la correcta regulación que permita una mayor globalización y eficiencia. Pero esta modificación de la fiscalidad de los fondos de inversión ha aumentado todavía más las distancias entre los inversores con grandes patrimonios y aquellos menos sofisticados y con menores fortunas.

El mejor sistema sanitario del mundo…¿en España?

 

Seguro de salud personal
Seguros de Salud Personales – Triple A

El título de este post me retrotrae a hace unos años cuando era popular entre los políticos decir que España tenía el mejor sistema financiero del mundo. Según parece, resultó no ser del todo verdad. ¿Pasará lo mismo con el sistema sanitario?

Hoy en día, es muy común escuchar a políticos contándonos que España tiene uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo. Sin embargo, desde OpSeeker no pensamos así. Creemos que la situación es complicada, tiene mala solución y vamos a tratar de compartir con todos vosotros nuestro punto de vista sobre este importantísimo tema.

Las implicaciones financieras de este asunto son fundamentales. Yo siempre digo, que antes de ponerse a responder las preguntas del perfil de inversor, para conocer tu aversión al riesgo, es esencial saber como vamos a resolver nuestro posibles problemas de salud. Si no lo hemos resuelto con un seguro, privado o seguridad social, el nivel de riesgo inversor que podemos correr es muy inferior.

En el post de hoy evaluaremos los seguros de salud privados y en el próximo post analizaremos la Sanidad ofrecida por la Seguridad Social. Anticipamos que en ambos casos la situación es complicada y no tenemos buenas soluciones. Espero que pensando entre todos con ingenio y creatividad, se nos ocurran algunas ideas.

La tipología de seguros de salud privados se cambió en España a finales del siglo XX. Los seguros de salud dejaron de ser “igualas” (de ahí viene la palabra Igualatorio), es decir seguros cuya duración contractual son toda la vida del asegurado y en los que la prima anual, por contrato, solo podía incrementarse la inflación. ¡De esta forma se mutualizaba el riesgo de vivir demasiado años! Estos fueron sustituidos por los nuevos seguros de salud cuyos contratos eran anuales renovables. El sector denominó a este cambio, eufemísticamente, tecnificación de las tarifas. Esto permitió vender seguros de salud con primas mensuales muy bajas a la gente de edades bajas (inferior a 40/50 años) dado que la siniestralidad sanitaria es muy baja cuando somos jóvenes. El problema es que a medida que la población va haciéndose mayor las primas tienen que subir exponencialmente y los asegurados no podrán pagarlas. Por ello, tendrán que terminar dándose de baja del seguro de salud en la vejez, que es cuando más falta nos hace la asistencia sanitaria. El 50% del gasto sanitario total de la vida, se produce en los dos últimos años de vida. 

Lo peor, es que los españoles no son conscientes de ésto. Esta técnificación de las tarifas nunca se la explicó nadie. Ni los políticos, ni las compañías aseguradoras, ni los comercializadores de seguros como los corredores o los bancos. Además, como algunos han visto envejecer a sus padres pudiendo mantener los pagos de las “igualas” de sus seguros de salud, piensan que su futuro será igual. Pero no es así, las tarifas se “tecnificaron” hace mucho. Lo curioso es que en países como EE.UU o Alemania, a los que criticamos por tener seguros de salud muy caros, lo común es tener seguros de salud tipo “iguala” vitalicios y no seguros de salud anuales renovables con tarifas “tecnificadas para ajustarlas a la siniestralidad de la edad”, como tenemos actualmente en España.

Hoy esto es un problema, pero obviamente, durante los próximos 10/20 años el problema se va a complicar mucho.

Una primera solución es ponerse en manos de la Seguridad Social. En el próximo post analizaremos sus ventajas y problemas. Otra posible salida, podría ser contratar, dentro del ámbito de la Unión Europea, el seguro de salud, por ejemplo en Alemania. Allí los seguros de salud vitalicios son más comunes. Y a vosotros lectores ¿se os ocurre alguna idea o solución?

 

Los seguros, el gran instrumento para mejorar nuestra salud financiera

Los seguros
Fuente: noticias-infocif.es

En el post anterior (Los seguros y la lotería: el Ying y el Yang de las finanzas) vimos que la magia de los seguros está en que, al contrario que la lotería, mutualizan los riesgos aportando bienestar social.

Siempre me ha gustado decir que la vida es simple. Se trata de trabajar duro para salir adelante, para los imprevistos ya están los seguros. Entre los seguros más interesantes está el de vida riesgo, sobre todo cuando eres joven y tienes hijos pequeños. Al contratarlo hay que tener en cuenta:

  • Tipo de cobertura. Debe ser decreciente con la edad. Cuando somos jóvenes es barato, y esto es bueno ya que es cuando no tenemos tanto poder adquisitivo, pero tiene que cubrir mucho porque es cuando de verdad hace falta. Si tenemos niños pequeños y no tenemos seguro vida riesgo, la falta del padre o madre puede suponer una tragedia, no solo emocional, sino también económica. A partir de los 50, aproximadamente, el producto tiene menos importancia ya que los hijos suelen tener una edad en la que se pueden valer por si mismos.
  • Las comisiones/gastos. Tienen que ser las menores posibles sin perder cobertura. Por ello, debemos comparar precios entre compañías.
  • Seguro de invalidez. Deben incluirlo, no contratar aquellos seguros que no lo incorporen para abaratar el precio de la cobertura.
  • A que va vinculado. En España es muy habitual contratarlo vinculado a la hipoteca. Sin embargo, suele tener peores condiciones en cuanto a comisiones y gastos que el contratado en venta libre. Además, a mí, conceptualmente, me parece más importante vincularlo a la nómina, como protección de los ingresos, que vincularlo a la vivienda.

Con el paso de los años debemos ir sustituyendo las aportaciones al seguro de vida riesgo por aportaciones a algún producto de ahorro a largo plazo. Los seguros de vida ahorro pueden ser una buena alternativa, especialmente los que logran invertir en activos de alta rentabilidad esperada a largo plazo como los bonos de larga duración y la renta variable, pero con suelos de pérdidas del 10/20/30%.

Cuando nos hacemos muy mayores, el riesgo pasa a ser “vivir demasiado”. Para ello están los seguros de rentas vitalicias. Imaginemos un matrimonio en el que ambos se jubilan con 65 años. En ese momento podrían vender su vivienda habitual con una exención fiscal sobre las plusvalías, ir a vivir a una casa de alquiler más pequeña e invertir parte del dinero obtenido en una renta vitalicia pura (con consumo de principal), con exenciones fiscales sobre la rentabilidad y con reversión al viudo/a. Es decir, se garantizan una renta con ventajas fiscales para toda la vida de ambas personas del matrimonio. ¡Llegar a los 110 años deja de ser un problema! Normalmente, lo mejor es contratar una renta con 65 e incrementarla con 70, 75 y 80. Así, se logra actualizarla con la inflación y no perder poder adquisitivo. Además, también se maximiza la ventaja fiscal que aumenta al contratar el seguro con mayor edad.

Al hacernos mayores la atención sanitaria pasa a ser más y más relevante. Lo importante, como siempre pasa con los seguros, es tomar las decisiones de contratación antes de que ocurran los problemas. Lo normal en España es ponerse en manos de la Seguridad Social. Con sus ventajas e inconvenientes. Los seguros de salud privados en España tienen dos problemas. Primero, son anuales renovables, no vitalicios como en otros países. Esto significa que cuando nos hacemos mayores de verdad con 70, 80 , 90 años, la prima subirá mucho de precio y no la podremos pagar. Lo malo, es que es a esas edades es cuando más nos hacen falta los seguros de salud. El segundo problema es que suelen tener unos límites muy bajos para los problemas de salud graves. Es decir, cuando nos hacen realmente falta, no nos sirven.

En este sentido, el seguro de hospitalización para enfermedades graves siempre me ha gustado como protección patrimonial. Cuando hemos logrado acumular un pequeño patrimonio a lo largo de nuestra vida (con nuestra vivienda, unos ahorros, un plan de pensiones, una segunda vivienda,…), éste se pone en riesgo ante una enfermedad grave de un miembro querido de la familia. Se comienza a dudar de que la Seguridad Social sea la mejor opción y empiezan a surgir comentarios sobre mejores alternativas en países extranjeros: Houston, Seattle, Paris… Se crea un problema psicológico difícil de resolver. Es cuando aparece la frase de que el dinero está para cuando hace falta. El resultado final suele ser que los problemas de salud se llevan el pequeño patrimonio familiar acumulado con tanto esfuerzo. La solución debería estar en este seguro de enfermedades graves o en la decisión vital, acordada familiarmente, de que pase lo que pase nos vamos a poner en manos de la Seguridad Social.

Lo más interesante de los seguros, que hemos comentado anteriormente, es que el coste suele ser barato, porque las probabilidades de que ocurran los siniestros son bajas. Sin embargo, tal y como hemos explicado, el valor aportado es muy grande porque se activan en caso de que ocurra la desgracia, al contrario que la lotería y el juego.

Y vosotros ¿qué seguros tenéis contratados?

Los seguros y la lotería: el Ying y el Yang de las finanzas

Décimos de Lotería - Los seguros y la lotería
spanishinvalladolid

En España somos muy aficionados a la lotería. Tenemos donde elegir: la de Navidad, la del Niño, la de los Ciegos, la Bonoloto… Además, muchas de estas loterías son del Estado.

Sin embargo, en España somos muy poco aficionados a los seguros. Basta comparar los datos de penetración de seguros entre la población española frente a la de otros países de nuestro entorno europeo como Holanda.

Y ¿cuál el motivo de mezclar lotería y seguros? La razón es que, en mi opinión, son la cara y la cruz de la misma moneda. El Ying y el Yang de las finanzas.

Ying Yang de las finanzas - Los seguros y la lotería
Dreamstime

Veamos un ejemplo. Imagínate que vivieses en un pueblo aislado de 10,000 habitantes. Supongamos que la población se organiza para realizar dos proyectos. El primer proyecto va a ser una lotería. Cada habitante va a jugarse 100 euros al año que se sortean el día 1 de enero. Así, cada año, a una persona le tocan un millón de euros. El otro proyecto es un seguro de vida. Cada habitante paga 100 euros al año de prima (supongamos, para simplificar, que todos los habitantes tienen la misma edad). Cuando una persona tiene la desgracia de fallecer, le dan el millón de euros a la familia del fallecido (supongamos, para simplificar, que todos los años se muere una persona). ¿Qué proyecto le parece más interesante y valioso para el pueblo?

La lotería se basa en la ley de los grandes números para, en base al azar, hacer que una de las personas salga brutalmente favorecida frente al resto. Las implicaciones de esto son tremendas. Primero, el que una persona, por azar, logre un nivel económico infinitamente superior al del resto, es una desgracia para todos los que no les toca. De hecho, a mi me gusta decir que compro el boleto de la lotería de la empresa en la que trabajo, por que para mí es un póliza de seguros que evita el “grave” riesgo de que les toque a mis compañeros y no me toque a mí. Segundo, para los que les toca, también suele ser un problema, porque les cambia tanto el nivel de vida que, muchos de ellos, no saben asimilar el cambio y con el tiempo se echan a perder.

El seguro de vida riesgo también se basa en la ley de los grandes números para luchar contra el azar, mutualizar los riesgos y evitar que una persona salga brutalmente desfavorecida por tener la mala suerte de morir joven y dejar a su familia en la ruina. Es decir, lo mismo que la lotería pero justo al contrario. Por eso son el Ying y el Yang de las finanzas, la luz y la oscuridad.

Luces y sombras - Los seguros y la lotería
light up! – WordPress

No alcanzo a entender que el Estado este detrás de la promoción de la lotería. La ley de los grandes números, aplicada a la mutualización de riesgos, es brutalmente valiosa para la sociedad. Sin embargo, aplicada a la lotería, como instrumento para generar desigualdad social a costa de todos, es una barbaridad.

Con esta breve historia quiero captar la atención de los lectores hacia la importancia y la utilidad social de los seguros. El profesor Robert J. Shiller, de la Universidad de Yale, en su libro Risks for the 21st Century explica magnificamente la importancia que los seguros han tenido a lo largo de la historia para el progreso y desarrollo de nuestra sociedad. Entre los ejemplos que el libro comenta destacamos el seguro de vida para el desarrollo de la navegación y el comercio entre Inglaterra y sus colonias o el seguro de hogar para el desarrollo de las ciudades tras el tremendo incendio que asoló Londres hace varios siglos.

Los seguros, al mutualizar los riesgos de la población en su conjunto, se convierten posiblemente en los productos financieros más importantes. Todos somos aversos al riesgo y los seguros lo que hacen es evitarnos los riesgos a través de la mutualización del azar. Como la lotería, pero al revés.

En próximos artículos explicaremos la importancia y las claves para adquirir:

  • Seguros de vida riesgo y de invalidez, para eliminar el riesgo financiero para nuestras familias de morir jóvenes.
  • Seguros de rentas vitalicias, para eliminar el riesgo financiero para nosotros y nuestras familias de vivir demasiados años.
  • Seguros de ahorro, diseñados para reducir los riesgo asociados a las finanzas del comportamiento.
  • Seguros de salud vitalicios y de primas niveladas, para eliminar el riesgo financiero de no poder pagarnos una asistencia sanitaria de calidad si vivimos demasiados años. Por cierto, estos seguros no se comercializan en España, lo que es un grave problema.
  • Seguros de Hospitalización de Enfermedades Graves, para eliminar el riesgo financiero de arruinarnos si tenemos la mala suerte de padecer nosotros o alguien de la familia una enfermedad grave que pensamos que será mejor atendida en algún país como EE.UU., Francia, Alemania o Inglaterra donde el tratamiento puede ser mejor, pero desde luego será una ruina. Algunos razonan el no tener un seguro de este tipo a que para estas ocasiones se pueden usar los ahorros o pedir un crédito… es así como llega la ruina económica o psicológica.
  • Seguros para el hogar, el coche, de Responsabilidad Civil…

Estad atentos porque “seguro” que estos próximos artículos os van a resultar muy valiosos e interesantes.

Comisión por números rojos: el control de gastos

Oficina de Kutxabank comisión por números rojos
Kutxabank cadenar ser

Leía esta semana en la prensa, “ Kutxabank deberá eliminar la comisión por números rojos ” y esto me ha hecho reflexionar.

No sé exactamente cuáles son los motivos por los que la Audiencia Provincial de Álava ha ratificado una condena previa a Kutxabank, pero quiero aprovechar este hecho para compartir con vosotros mis reflexiones acerca de la comisión por números rojos.

En OpSeeker nos interesa tratar de mejorar la salud financiera de la gente. Os preguntaréis ¿en qué medida está relacionado esto con la comisión por números rojos?

Los números rojos se producen cuando alguien no tiene dinero suficiente en su cuenta corriente para pagar un recibo. Y aquí esta la clave: los recibos, que representan nuestros gastos. Como sabéis, en OpSeeker pensamos que el control de los gastos, intentando siempre gastar menos de lo que se ingresa, es el consejo número uno para lograr tener salud financiera. Ya lo explicamos en nuestro método en la landing page de OpSeeker

En mi opinión, el sistema automático de domiciliación de recibos que tenemos en España es la clave del desastre. Resulta que los españoles estamos acostumbrados a que nos lleguen todo tipo de recibos de forma inesperada a la cuenta corriente. Y nos parece normal. Para no tener problemas con los números rojos mantenemos los saldos elevados en cuenta corriente. Es decir, nuestro miedo a los números rojos y a las elevadas comisiones que nos va a cobrar el banco hace que mantengamos mucho líquido en la cuenta corriente.

Esta forma de operar genera dos graves problemas. Primero, que mantenemos altos saldos en cuenta corriente sin remuneración. Segundo, que no realizamos un buen control de gastos al ir siempre por detrás de los recibos.

En otros países, nadie puede retirar dinero de tu cuenta corriente sin tu autorización. Cuando quieres pagar por un servicio, como el teléfono, o el gas, tu primero recibes la factura y si crees que es correcta, la pagas, antiguamente con un cheque y hoy en día con un click en la página de banca electrónica de tu banco. Antes de pagar cada factura, te sientas tranquilamente, la revisas, llamas al proveedor si tienes alguna duda, confirmas que tienes saldo en cuenta corriente (si no lo tienes lo traspasas desde alguna cuenta de ahorro o de crédito) y después, al final, pagas las facturas que consideras que debes pagar. Vamos, que pagas a estas compañías de la misma manera que pagan ellos a sus proveedores.

El sistema automático de domiciliación de recibos es magnífico para las grandes compañías eléctricas, de gas, de telefonía y otras muchas, ya que pasan sus recibos a cobrar al banco y automáticamente reciben el dinero. Los bancos españoles, tradicionalmente han mantenido unas comisiones de números rojos muy elevadas. Esto resulta en elevados saldos en cuenta corriente sin remunerar, que lo hacen atractivo para el banco, pero no para el cliente que no ven ningún rendimiento en este dinero. La combinación de llegada de recibos a cobrar inesperados  y de la elevada comisión de números rojos, no dejaba otra alternativa al cliente habitual español.

El control de los gastos es fundamental para tener unos ciudadanos financieramente maduros. La domiciliación automática de recibos genera, en mi opinión, un descontrol total. Las grandes compañías cobran de forma muy cómoda y los bancos tienen buenas rentabilidades en cuentas corrientes por los altos saldos, pero creo que esto debería cambiar. La llegada de la banca electrónica puede facilitar que los ciudadanos paguen a sus proveedores autorizando cada recibo, con control, igual que lo hacen las grandes compañías con sus proveedores. Esto sería mucho más útil que todas estas aplicaciones nuevas que te informan por Internet con mensajes del tipo “…tiene 25 movimientos sin revisar…”. ¿No sería más correcto que los movimientos no se produjeran hasta que el cliente los autorizara? Aunque quizás seamos nosotros los que, como buenos Quijotes de la banca, confundamos gigantes con molinos.

¡La imaginación al poder! El Acelerador de Inversiones Virtual (AIV)

Virtual Currency
Virtual Currency

Quiero comenzar este post recordando la frase del mayo francés del 68: “La imaginación al poder”. Desde la revolución francesa, Francia ha sido brillante ensalzando la fuerza de la libertad y la imaginación; la lucha por la fraternidad humana como fuente de energía vital. Os invito a que leáis este post después de ver el emocionante video de Les Miserables: “¿oyes al pueblo cantar?”

Desde que empezamos a trabajar en OpSeeker con la ilusión de ayudar a la gente sencilla, nos dimos cuenta de que la utilización de cuentas con dinero virtual de simulación podían ser muy útiles para muy diversos usos.

Pensemos en la inversión a largo plazo, que es el objetivo para el que estamos dando ideas y soluciones actualmente desde OpSeeker. ¿Qué podríamos hacer con dinero virtual para ayudar a muchos pequeños y medianos inversores? Si estamos hablando de que la inversión a largo plazo va a acompañarnos durante muchos años de nuestra vida, quizás 40, 50 ó 60 años… ¿No tendría sentido antes de enfrentarnos a las incertidumbres de esta decisión, tener la posibilidad de jugar con dinero virtual de simulación? ¿No nos permitiría aprender y experimentar con la sensación de invertir, pero sin correr riesgos?

Por ejemplo, llega un cliente a una sucursal bancaria pensando en iniciar un plan de pensiones para su jubilación. Tiene 30.000 euros ahorrados y tiene la intención de aportar todos los meses 150 euros. Además, se ha querido comprometer con un plan “Ahorra más mañana” (Save more tomorrow), por lo que la aportación mensual tiene planeado incrementarla automáticamente todos los años un 5%. Una vez que ha dado toda la información al gestor de la entidad financiera, no está del todo seguro. Es una decisión para muchos años y quiere pensárselo un poco antes de decidirse. En lugar de dejar que el cliente se vaya, sin más, ¿no sería más útil que la entidad financiera, con toda la información recibida, le abriera un plan de ahorro a largo plazo con dinero virtual de simulación? El coste para el banco sería prácticamente mínimo. Ya le ha dedicado el tiempo al cliente y tiene los sistemas informáticos para poder hacer el ejercicio de simulación.

¿Para qué sirve el dinero virtual de simulación?

Veamos cuáles podrían ser las utilidades para el cliente de esta simulación.

1. Consulta de productos

El cliente podría consultar en cualquier momento las características concretas del producto, o productos, contratado. Tendría acceso a esta información por los sistemas de Internet del banco, como si fuera cliente. Abría dado el primer paso, el más difícil, para convertirse en inversor de largo plazo.

2. Entender la volatilidad en el corto plazo

Como el dinero virtual estaría aparentemente invertido, el cliente cada día vería las fluctuaciones en su patrimonio en función de los movimientos en el mercado. No solo lo vería, sino que lo experimentaría como si fuera cierto. Los días que suba, se irá a la cama muy contento. Los días que baje, a lo mejor le costaría conciliar el sueño pensando en qué habría pasado si hubiera invertido de verdad y su inversión cayese varios días seguidos…

3. Acelerador de Inversiones Virtual (AIV)

Imaginemos que cada día de simulación, además de informar sobre la evolución real del mercado en ese día, hiciéramos correr un año de simulación. Es decir, igual que los aceleradores de partículas de la física son capaces de acelerar partículas subatómicas para que seamos capaces de estudiar mejor sus cualidades, nosotros podemos, con nuestro Acelerador de Inversiones Virtual, acelerar las inversiones para poder estudiarlas más detalladamente. Con nuestro acelerador, el cliente vería, cada día, la evolución real de los mercados para su inversión. Pero, además, tendría una simulación estadística sobre lo que le podría haber pasado a lo largo de un año entero como inversor. De esta forma, durante los diez primeros días tendría una simulación acelerada para los diez primeros años. Seguramente, con esta experimentación, entendería mejor lo que se sufre con la volatilidad y la incertidumbre de los mercados. Habría días que se iría a la cama pensando lo duro que puede ser acumular pérdidas durante varios años seguidos…

El inversor se preguntaría ¿Me siento capaz de hacer frente a esas incertidumbres con mis ahorros de verdad? Sin embargo, seguramente a partir del día 20 ó 30 (es decir, tras 20/30 años de inversión) empezaría a experimentar y a entender de verdad el poder del interés compuesto de la renta variable en el largo plazo. Empezaría a ver escenarios en los que su ahorro estaría por encima del millón de euros. Experimentaría con la posibilidad real de ser millonario en euros, como resultado de su trabajo, su esfuerzo, su paciencia y su inteligencia. ¿No le aportaría toda esta experiencia de imaginación durante 30 ó 40 días una gran fuerza para luchar por su futuro? Parece que esta sencilla experiencia con un simulador podría ayudar a muchísima gente sencilla a entender mejor los riesgos y a ilusionarse mucho más con un proyecto de inversión a largo plazo.

4. Comparativa de inversiones

Supongamos que en lugar de abrirle un solo plan de inversión, abrimos dos para cada cliente. Uno con las proporciones 80/20 en Renta Variable y Renta Fija y el otro con 20/80. De esta forma, el cliente tendría la posibilidad de experimentar las diferencias entre uno y otro durante los 30 ó 40 días que durase la simulación con el dinero virtual.

5. Otra información de interés

Además se le podrían suministrar otras informaciones de interés para el cliente, como por ejemplo: ¿cuánto dinero ingresa el banco como distribuidor financiero de tu producto después de los 30/40 años? ¿Cuánto dinero ingresa la gestora? ¿Cómo varían estas cifras si contratamos fondos de gestión activa frente a fondos de gestión activa? ¿Cuánto es el dinero aportado al plan durante todos estos años y cuánto es el dinero producto de la rentabilidad de las inversiones? ¿Cuánto dinero tendría que pagar en impuestos por las plusvalías obtenidas? ¿Cuánto sería el poder adquisitivo real de su dinero ahorrado al restarle los gastos de distribución financiera, los gastos de gestión, los impuestos y ajustarlo con la inflación acumulada durante tantos años? ¿Cómo comparan respecto a todos estos datos la inversión con más renta variable frente a la inversión con más renta fija?

¿Por qué las entidades financieras no lo utilizan?

Lo que me cuesta entender es porqué las entidades financieras no han desarrollado estos simuladores desde hace muchos años. Salvo los análisis planteados en el punto quinto anterior, todos los demás ejercicios ayudarían a generar una importante pre-vinculación con el potencial cliente con muy poco gasto adicional para el banco. Pienso que esta carencia debe estar asociada a la falta de independencia de pensamiento. De hecho yo he trabajado en banca durante muchos años y nunca se me había ocurrido. Sin embargo, ahora, cabalgando en libertad como Don Quijote de la Banca, esta idea me parece obvia. Llego a pensar, que quizás debería ser obligatorio antes de iniciar un plan de inversiones real a largo plazo, pasar por el Acelerador Virtual de Inversiones durante 30 ó 40 días.

Los franceses tenían razón. La independencia da libertad de pensamiento, que a su vez, excita la creatividad y la imaginación. ¡La imaginación al poder!

Descubriendo el Blogapp OpSeeker – El CVE

Contrato de Expectativas CVE©

Durante las próximas semanas vamos a ir publicando una serie de posts para desarrollar el concepto de Blogapp explicado en el post de la semana pasada Bob Dylan, Donald Trump y nuestro “Blogapp”. Durante los meses posteriores iremos lanzando las herramientas explicadas en estos posts. Es crucial para nosotros que nos digáis, en la sección de comentarios, lo que pensáis sobre estas herramientas. Para poder crear el Blogapp que más se ajuste a vuestras necesidades queremos tener vuestro feedback ;).

En uno de nuestros últimos posts, La magia del interés compuesto, explicábamos que la Renta Variable (RV a partir de ahora, Renta Fija será RF) diversificada y con bajas comisiones de gestión es la clave para obtener una buena rentabilidad en el largo plazo. Esto se produce al aumentar exponencialmente el impacto del interés compuesto. El problema es que invertir en RV es fácil de decir pero difícil de hacer. La elevada volatilidad de este mercado hace que suframos mucho en el corto plazo con las fuertes subidas y bajadas y la incertidumbre que generan.

El Contrato Virtual de Expectativas (CVE)

De aquí surgió como idea lo que hemos llamado “Contrato Virtual de Expectativas” (CVE), que pone de relieve la importancia del compromiso con un plan, antes de ejecutar nuestras inversiones. Lo que se pretende es reducir el problema del arrepentimiento, que surge cuando sufrimos caídas en la bolsa, y que provocan la tentación de romper el plan de inversiones a destiempo. Es decir, vendiendo barato para más tarde, seguramente, comprar caro. Un desastre financiero que debemos evitar. Con esto empezamos a trabajar lo que ya habíamos presentado en nuestro primer post Salud Financiera: Una inversión de Futuro, las finanzas de comportamiento, la parte psicológica de la inversión.

Veamos en que consite el CVE:

  • Paso 1: Reflexiona y experimenta a través de diversos perfiles de inversión y de calculadoras financieras
    Hace dos semanas te informábamos sobre diversos links a sites financieros (Vanguard, Nationale Nederlanden, Profesor Swensen y muchos otros posibles ) que te pueden ayudar a decidir el porcentaje en RV que te interesa. Recomendamos comparar las diferentes propuestas que existen, incluida la nuestra, (En el post de la semana que viene os explicaremos las opciones que existen en el mercado) y reflexionar cual es más adecuada para cada individuo.
  • Paso 2: Decide el peso de RV y RF para tu cartera de inversión y revisa el CVE que te corresponde
    Esta es la decisión financiera más importante que vas a tomar en tu plan de inversiones. Cada uno tiene que pensar lo que quiere ¿Quieres estar equilibrado en un 50% en RV o 50% en RF? ¿Quieres tener un peso importante, del 80%, en RV y solo del 20% en RF? o al contrario, ¿Prefieres un bajo peso, del 20%, en RV y por tanto el 80% en RF? Como sabes por otros posts, en OpSeeker pensamos que, en general, es recomendable tener un sesgo hacia altos pesos de inversión en RV. Es la mejor forma de proteger nuestra salud financiera en la inversión a largo plazo.
    A cada peso de RV le corresponde un CVE distinto. Por ejemplo:

    • Si te inclinas por un 80% en RV y un 20% en RF el CVE dirá algo del estilo de:
      “Dado que he elegido un alto porcentaje en RV, estoy protegiendo adecuadamente mi salud financiera para el largo plazo (por encima de 15/20 años)…
      … sin embargo, la elevada volatilidad de la RV en el corto plazo, puede hacer que el valor de mis inversiones fluctúe mucho al alza y a la baja… …Esto puede ser un problema psicológico grave que me genere ansiedad, descontento y arrepentimiento tanto a mí como a las personas que partían en el plan finaciero (conyuge, hijos, padre, hermano, amigo,…)…
      … Sin embargo, he decidido que son más importantes las ventajas para el largo plazo de este plan, que los inconvenientes de la fluctuación en el corto…
      … Por ello, a pesar de que pueda sufrir deseos de arrepentimiento con este plan, he decidido comprometerme con él y firmar este contrato conmigo mismo y así no “sufrir” con las volatilidades del corto plazo.”
  • Paso 4: Sube una foto del CVE desde el móvil a la web de OpSeeker
    Con tu móvil, saca una foto de los CVE y súbelas a tu cuenta de OpSeeker. De esta forma, siempre tendrás accesible vuestro compromiso.
    Imagínate que dos años después de haber iniciado tu plan de inversiones con un 80% en RV, salta una crisis económica. Resulta que en dos días, el valor de tu inversión ha caído desde 50.000 euros hasta 29.000 euros. Tu marido está de viaje y te llama preocupado por la pérdida. Te propone que retiréis el dinero antes de que siga cayendo. Tú has dormido mal los dos días anteriores porque estabas preocupada con la crisis de la bolsa y porque puede ser que pierdas el trabajo. Estás ofuscada y no puedes pensar bien. Sin embargo, tienes la sensación que el plan de inversiones que iniciasteis con tanta ilusión hace dos años para el largo plazo, debe ser importante mantenerlo. ¿Te resultaría útil decir a tu marido que quieres que relea el CVE que firmasteis cada uno hace dos años? ¿Te daría cierta tranquilidad recordar que hace dos años, tras reflexionarlo bien, decidistéis que esta era el plan que os interesaba? ¿Te ayudarán estos CVE a reducir vuestra sensación de arrepentimiento?

¿Por qué nadie se preocupa de la parte psicológica?

Lo sorprendente, es que algo tan sencillo como este contrato de expectativas que firmamos con nosotros mismos y que parece que puede ser muy útil, no lo hayan inventado las entidades financieras que se dedican a la venta de productos de inversión. En OpSeeker pensamos que el motivo radica en que nosotros nos hemos dotado de la máxima independencia para pensar con total libertad y así aumentar nuestra creatividad. ¡Un poco como Don Quijote! Nosotros queremos, simplemente, ser útiles a las personas para mejorar su salud financiera. No estamos mediatizados por tener que vender nuestros productos o por tener que cobrar una comisión por asesorar. Esta forma de pensar libre, unida al poder que nos da internet de llegar a una gran audiencia por un coste marginal 0, es lo que hace que nuestra propuesta sea tan interesante.

Las entidades financieras, por ejemplo, necesitan vender sus productos. Por ello, el sistema que han desarrollado para resolver este problema, que se llama Perfil de Inversión, debe cumplir fundamentalmente dos condiciones. Primero, cubrirles legalmente frente al cliente para evitar que años después de la venta pueda haber reclamaciones. Segundo, debe ser comercialmente eficiente, es decir, no debe consumir un tiempo excesivo del comercial. Así se diseñó el Perfil de Inversión. El problema es que al no priorizar la ayuda al inversor sobre cualquier otro interés, tiene algunos problemas.

Por ejemplo, si uno entra en Indexa (el primer gestor automatizado español que hemos alabado en varias ocasiones) y responde a las preguntas sobre el Perfil de Inversión, en unos minutos tendrá una propuesta de inversión razonable, pero con algunos problemas. Primero, el cliente, tras una pequeña reflexión y con la respuesta de la máquina, tiende a pensar que la solución propuesta es la perfecta para él. El problema surge cuando al cabo de un tiempo, hay una crisis, cae la bolsa y el cliente no entiende bien lo que pasa. En ese momento es muy probable que surja el riesgo de arrepentimiento. El segundo problema es que Indexa (y las demás gestoras y asesoras), sabiendo que el problema anterior puede ocurrir, tiende a hacer propuestas un poco conservadoras en cuanto al peso de RV.

En OpSeeker pensamos que es mejor dedicar más tiempo a la reflexión para así maximizar el peso en RV que cada uno va a estar dispuesto a tolerar. Después, lo importante es comprometerse con el plan. Para ello hay que tener la ayuda de herramientas como el CVE.

En próximos blogapps escribiremos sobre Dinero Virtual Ficticio (DVF) y la importancia de jugar antes de invertir como método para superar las paralizantes primeras barreras hacia un plan de inversión. También hablaremos sobre el Acelerador de Inversiones (AI) y la importancia de experimentar antes de invertir.

¡Y recordad! Nosotros queremos proporcionaros la mejor solución para mejorar vuestra salud financiera. Para ello necesitamos vuestro feedback ;). Podéis comentar en nuestros posts o mandarnos un email a info@opseeker.com. ¡Contestamos a todo! GRACIAS.

 

El problema de la jubilación tiene solución (3/3): los planes de pensiones de empleo.

Nudge - Richard Thaler - Planes de pensiones de empleo
Nudge – Richard Thaler – loymachedo.blogspot

En los dos posts anteriores de la serie que cierra este post, hemos explicado que el problema de la jubilación se puede resolver desde un punto de vista individual:

En este tercer post de la serie sobre el problema de la jubilación, vamos a plantear lo que creemos que se debe hacer desde el Estado para ayudar a las personas a resolver sus problemas financieros en la vejez.

Se llaman Fondos y Planes de Pensiones de Empleo, combinados con lo que los americanos pusieron en marcha con los sistemas “Save More Tomorrow (SMarT)”.

Planes de Pensiones de Empleo

A pesar de nuestros anteriores posts, en los cuales comentamos como debemos actuar cada uno de nosotros para poder vivir una vida plena en nuestros años de vejez, sabemos que es casi imposible que la mayoría de las personas tengamos la disciplina suficiente para ahorrar las cantidades necesarias para el futuro.

Sin embargo, imaginemos que desde el Gobierno se legislase que, por decreto, nos van a quitar un porcentaje de nuestras nóminas, por ejemplo un 3%. Es decir, la empresa nos lo retiene y se invierte en un Plan de Pensiones de Empresa, pero a tu nombre. Además, supongamos que está permitido darse de baja de este Plan, pero hay que solicitarlo, justificarlo con la firma de los dos cónyuges, firmar un papel en el que se reconoce que explícitamente no se está ahorrando para el largo plazo… Esto es lo que se llama “opt-out”. En caso de no hacer nada, se sigue en el plan.

Este plan estaría invertido en productos indexados que se ajustasen a las necesidades de cada inversor. Explicamos el por qué de esto en el post de la semana pasada: Los fondos indexados: el futuro llega a España.

Las finanzas de comportamiento y los planes de Pensiones de Empresa

Lo curioso es que los estudios de Finanzas del Comportamiento muestran que cerca del 80% mantendrían el plan mencionado anteriormente, a pesar de que en la práctica es voluntario. En el caso contrario, el “opt-in”, donde si la persona no hace nada no tiene un plan y que en la práctica es el actual en España con los Planes de Pensiones Individuales, no llega al 20% las personas que tienen un plan. Es curioso, pero somos así de irracionales y de indisciplinados.

Ambos sistemas son voluntarios, pero uno logra que lo suscriba el 80% de la población y el otro, también voluntario, solo alcanza al 20% de la población. Esto lo explica fantásticamente Olivia S. Mitchell, profesora de Wharton y responsable del centro de investigación sobre pensiones. Uno de los papers escritos por Olivia S. Mitchell y que mejor explica como las finanzas de comportamiento afectan al ahorro para el largo plazo y al sistema de pensiones es el siguiente Lessons From Behavioral Finance for Retirment Plan Design

SmarT – Save more Tomorrow

Para conseguir un mejor ahorro y un mayor impacto con nuestras inversiones se debería combinar el sistema “opt-out” con el de “Save More Tomorrow (SmarT)¨. SmarT es un sistema que motiva a los trabajadores a que se pre-comprometan a subir sus aportaciones al plan, por ejemplo, un 3% anualmente. Esta subida del 3% coincidiría en muchos casos con el aniversario del plan y con las subidas de sueldo anuales. Thaler y Sunstein lo explican magníficamente en su libro “Nudge” (que significa “guiar”). También podéis entender perfectamente lo que es SmarT en este paper de la universidad de Chicago: Save More Tomorrow: Using Behavioral Economics to Increase Employee Saving

OpSeeker te va a ayudar con tus finanzas de comportamiento

Desde OpSeeker estamos creando herramientas que os van a ayudar a entender y dominar las finanzas de comportamiento para así invertir de una manera eficiente y sin caer en errores irracionales. Si te interesa mejorar tu salud financiera puedes suscribirte a nuestra beta en nuestra landing page – OpSeeker

El problema de la jubilación tiene solución (2/3): La magia del interés compuesto

retorno por clase de activo
Retorno por clase de activo – Fuente mpmgllc

Este es el segundo post de la serie El problema de la jubilación tiene solución que comienza con Trabajar “toda la vida” y termina con Los planes de pensiones de empleo.

Es famosa la leyenda del sabio hindú y del tablero de ajedrez. El sabio hindú pide como recompensa, por sus múltiples favores, que le paguen de la siguiente manera. El deudor debe ir poniendo un grano de trigo en la primera casilla del tablero de ajedrez e ir duplicando la cantidad hasta la casilla 64. No había granos de trigo suficientes en toda la Tierra para pagar al sabio. A continuación tenéis un simpático link sobre “matemáticas cercanas” que explica muy bien: La leyenda del tablero de ajedrez y los granos de trigo y ejemplifica estupendamente la magia del interés compuesto.

Lo interesante para nosotros de esta anécdota es que ilustra muy bien lo importante que es el interés compuesto para los inversores y lo difícil que es entenderlo y asimilarlo. Por eso, a la mayoría de nosotros se nos pasa la vida sin utilizarlo.

La magia del interés compuesto

Veamos un sencillo ejemplo de inversión. Imaginemos un joven de 25 años que en lugar de comprarse un “bonito” coche de 25.000 euros, decide comprarse, por 5.000 euros, un coche de segunda mano. Una “oportunidad” que le ofrece su hermano mayor, que va a cambiar de coche. Gracias a este ahorro, decide invertir los 20.000 euros a largo plazo, para cuando lo necesite en la vejez. Él estima que va a tener que trabajar muchos años (ha leído nuestro post anterior) y cree que necesitará el dinero cuando tenga unos 75 años. ¿Con cuánto dinero se encontrará a esa edad? La contestación, depende mucho de lo que se “atreva” a hacer con esos 20.000 euros:

  • Si los invierte en un producto de renta fija con una rentabilidad esperada del 4% y con gastos totales del 1,5% (habituales en España), se encontrará con unos 70.000 euros .
  • Si redujera los gastos totales del producto al 0,3% (algo muy dificil de encontrar hoy por hoy en España), la cifra mejoraría hasta 125.000 euros. ¡Casi el doble!
  • Lo maravilloso ocurriría, si además de reducir los gastos al 0,3%, lo invirtiera en renta variable diversificada e indexada con una rentabilidad esperada del 9%. Entonces se encontraría con alrededor de un millón trescientos mil euros. ¡Es decir, sería millonario!

Reducir los gastos y comisiones de nuestra inversión es importante, pero es mucho más importante invertir en los productos adecuados.

La renta variable es la mejor aliada del interés compuesto

La situación en la práctica es incluso peor, ya que en términos reales de poder adquisitivo (al descontar la inflación) y después de impuestos (que se pagan sobre rentabilidades nominales), las rentabilidades son negativas en España. Es decir, que después de 75 años, se encontraría, “realmente”, con mucho menos de 20.000 euros. ¡Un desastre que explica, creo yo, por qué quizás al final la gente prefiere no ahorrar! Hay numerosos estudios y artículos de prensa en este sentido. Son especialmente interesantes los realizados por el Profesor Pablo Fernández del IESE:

Además, son muy interesantes los estudios del Profesor Jeremy Siegel, de The Wharton School, que demostró en su libro “Stocks for the Long Run” (que va por la quinta edición) que a largo plazo y después de la inflación, la renta variable tiene no solo más rentabilidad, sino menos riesgo que la renta fija (por el efecto de la inflación sobre la renta fija).

El miedo a la renta variable

Entonces, ¿porqué no invertimos en renta variable para el largo plazo? La respuesta está en nuestra psicología humana. La renta variable fluctúa mucho en el corto y medio plazo, aunque funciona fantásticamente en el largo plazo. La renta fija, sin embargo, nos da tranquilidad en el corto plazo, a pesar de que en el largo plazo se comporta mal, especialmente después de la inflación.

Por ello, los asesores y distribuidores financieros tienen dificultad para “atreverse “ a recomendar los porcentajes de renta variable que realmente serían adecuados. Además, es cierto que normalmente, la gente no está preparada para sufrir fluctuaciones del 25 o el 50% en sus ahorros, a los pocos años de invertir. El premio nobel de economía, William Sharpe, decía que habría que inventar las inversiones en Black Boxes. Invertir el dinero y no mirarlo hasta el final de la inversión, para no sufrir con las volatilidades del mercado.

Por ello desde OpSeeker, queremos ayudar a la gente a vencer estos problemas de la psicología humana. Por ejemplo, el post de hace un par de semanas –  El problema de la jubilación tiene solución: trabajar “toda la vida” – al empoderarnos con nuestra capacidad para trabajar durante muchos años, hace que nos “atrevamos” con inversiones en renta variable, que van a fluctuar más en el corto plazo. Los conceptos que vamos a introducir de dinero ficticio, el Contrato Virtual de Expectativas y otras innovaciones irán en esta dirección.

Links de interés para trabajar la magia del interés compuesto

En cualquier caso, a continuación ponemos varios links de interesantes webs que abordan acertadamente este problema del adecuado porcentaje de renta variable en la inversión a largo plazo:

  • Nationale Nederlanden en su blog seguros de tu a tu, nos propone la sencilla pero interesante regla del 120. Si a 120 le restas tu edad, ese es el porcentaje que debes tener en renta variable. Por ejemplo, alguien con 50 años, debería tener aproximadamente el 70% en renta variable.
  • Incluso, en el blog de donquijotedelabanca, ya en 2007 recomendábamos las carteras propuestas por el profesor Swensen de Yale.

Desde donquijotedelabanca, en próximos posts, seguiremos abordando el problema de la inversión a largo plazo, tratando de ayudar de forma simple y directa a conseguir el ideal de lograr una mejor salud financiera para todos los españoles.

Para leer el último post de la serie El problema de la jubilación tiene solución aquí –> Los planes de pensiones de empleo

Muchas gracias a todos 🙂 y no os olvidéis de comentar cualquier cosa que queráis!

El problema de la jubilación tiene solución (1/3): trabajar “toda la vida”

El Becario – Robert De Niro, Anne Hathaway

Desde OpSeeker queremos ayudar a la gente a mejorar su salud financiera. Hemos elegido como primer problema a resolver el de la jubilación.

En el post de hace dos semanas OpSeeker ¿por qué y cómo puede ayudarte a mejorar tu salud financiera? anticipamos nuestra principal reflexión respecto a este tema. Pensamos que la solución consiste en estar preparado para trabajar “toda la vida”. Así de golpe, suena muy duro. En este post trataremos de explicar que realmente esta es la única solución realista y además beneficiosa para todos.

El estado debe seguir pagando la jubilación

En primer lugar, queremos destacar que, por supuesto, estamos a favor de que el Estado cumpla con su promesa, a través de la Seguridad Social, de pagar sus compromisos con las personas que vayan cumpliendo la edad de jubilación. Especialmente con los más necesitados. Cuanto más y mejor sea capaz de pagar el Estado a los jubilados, mejor.

El problema es que las cuentas no van a salir. Ni para el Estado, ni para los individuos que ahorren de forma privada:

  • La famosa pirámide demográfica hará imposible el sistema de pensiones de reparto, que a principios del siglo XX funcionaba magníficamente. Además, la financiación de la Sanidad Pública tendrá el mismo problema demográfico, lo que tensionará aún más la financiación pública de pensiones y sanidad de los mayores.
  • El ahorro individual deberá ser un importante complemento, pero la más mínima reflexión muestra que para la mayoría de la gente es absolutamente imposible que ahorren suficiente dinero (bastante es que logren ahorrar algo) para completar sus ingresos desde los 60-65 años hasta cerca de los 100 años, que parece que es lo que vamos a vivir. Vivir de las rentas durante 35-40 años, parece demasiado. Por supuesto, todos los esfuerzos que se hagan en esta dirección, serán muy útiles. Especialmente si se potencian, de forma inteligente, los planes de pensiones de empleo.

Trabajar más años y no pensar en la jubilación

La única solución, además obvia, es trabajar muchos más años. Dicho de otra manera más directa: “estar dispuesto a trabajar toda la vida”. Pensemos que cuando los alemanes, a finales del siglo XIX, inventaron por primera vez en la historia el seguro de jubilación, la gente vivía de media menos de 70 años. Al jubilarse a los 65 lo que ocurría es que vivían pocos años sin trabajar. Es decir, que en la práctica, “trabajaban toda la vida”.

¿Porqué fue tan importante entonces la invención del seguro de jubilación? En aquella época, más pobre que la actual, la gente humilde vivía con la ansiedad de no saber que sería de ellos cuando no fueran capaces de trabajar. Es decir, no les preocupaba ni les interesaba dejar de trabajar, sino su situación cuando no fueran capaces de ganarse la vida con su trabajo. Y esta grave preocupación vital es lo que solucionó magníficamente el seguro de jubilación. El problema es que este concepto se ha ido pervirtiendo y ha ido haciendo creer a la gente que jubilarse, dejar de trabajar, tiene que ser nuestro sueño vital. Pensamos que esto es una grave perversión del sistema. Veamos porqué:

  • Si preguntamos a los jubilados actuales si les gustaría tener un trabajo/ocupación que les deje cada semana “más horas libres de las que necesita”, ¿no pensamos que todos preferirían tener ese trabajo/ocupación parcial? Es decir, parece que trabajar/colaborar en alguna actividad 2-3 horas al día durante 3-5 días por semana, seguramente interese a casi todos los jubilados. El problema es que en la sociedad española se ha perdido esta cultura de ocupación de los mayores. Es curioso, que en la cultura anglosajona es diferente. En la reciente película el becario, con Robert De Niro y Anne Hathaway, nos dejan muchas muestras de lo bueno que es que los mayores sigan trabajando, para muestra un botón:

  • Desde un punto de vista económico, trabajar entre 10-20 horas semanales, puede representar, fácilmente, unos ingresos de entre 500 y 1.000 euros al mes (que deberían estar libres de impuestos) que para muchos jubilados representaría multiplicar por dos su pensión de jubilación. ¿No parece obvio que cualquiera de estos jubilados preferiría sentirse útil a la sociedad aportando su trabajo y además que el dinero adicional le sería de gran uso? ¿No se sentirían todos estos jubilados más seguros de si mismos y con más tranquilidad vital? De nuevo un clip de nuestra película del día (¡Un poco de sabiduría y de experiencia no les viene nada mal a los jóvenes de hoy!):

Seguir trabajando puede ser bueno para nuestra salud

Además, desde el punto de vista psicológico, esta actitud ante la vida de “morir con las botas puestas y activo” (frente a la del sueño de la jubilación para estar 40 años “viviendo sin trabajar”) parece que tiene importantes ventajas:

Estos estudios, parecen demostrar algo que resulta obvio. Un jubilado activo (valga la contradicción), se siente más conectado, más satisfecho y más saludable. ¡Parece claro ;)!

 

  • Por otro lado, esta actitud de “estar dispuesto a trabajar toda la vida” reduce en gran medida la ansiedad vital que abruma a los trabajadores en activo. Especialmente a partir de los 40-50 años empieza a preocuparles que va a ser de ellos cuando alcancen “el sueño de jubilarse”. Intuyen que el problema no tiene buena solución. La población necesita entender cuanto antes que estar jubilados durante 30-40 años, no solo es económicamente inviable, sino que además es malo para su bienestar. Además, al tomar las riendas de su vida reducirán en gran medida la ansiedad provocada por la preocupación de jubilarse. Parece que el problema a resolver es el contrario al existente a finales del siglo XIX. En próximos posts hablaremos sobre las teorías del Profesor Stewart D. Friedman, de The Wharton School, sobre como encontrar la armonía entre Trabajo, Hogar, Entorno Social y Uno Mismo (cuerpo, mente y alma) y por tanto facilitar la prolongación satisfactoria de la vida laboral. Para más información consultar: totalleadership.org

La parte financiera individual es muy importante para la jubilación

Finalmente, por supuesto, existe una componente financiera y de ahorro asociada a la jubilación, que trataremos en próximos posts del blog:

  • Para empezar, nosotros en OpSeeker vamos cambiar el lenguaje. En lugar de hablar de ahorro para la jubilación, hablaremos de ahorro para el largo plazo. Parece una tontería, pero explicaremos que tiene importantes implicaciones. Por ejemplo, si estás ahorrando dinero para “cuando lo necesites porque estás jubilado”, ¿lo “arriesgarías invirtiéndolo en renta variable o mejor lo tendrías en un producto con capital asegurado para no arriesgarte a perderlo todo de viejo? Sin embargo, si estás ahorrando para “el largo plazo”, porque tu actitud es ganarte la vida toda la vida trabando y estando activo ¿te “atreverías “ a invertir en renta variable?
  • Explicaremos como lograr ser austeros con el gasto y porque es importante para:
    • Lograr tener un remanente de ahorro que podamos invertir.
    • Facilitar el ajuste de nuestro nivel de vida cuando se reduzcan nuestros ingresos.
    • Aumentar la utilidad del dinero y el tiempo gastado y así mejorar nuestra satisfacción vital.
  • Revisaremos referencias como el libro Die Broke de Stephen M. Pollan (que hace años me recomendó un experto quijote financiero y mejor amigo) que sugiere:
    • Quit Today –  Es decir, sea cual sea tu trabajo siempre eres prescindible. Ganes lo que ganes, tienes que pensar que este salario puede no ser para siempre y vivir en concordancia.
    • Pay Cash –  Sé consciente del dinero que gasta. Trata de no tener deudas y ten cuidado con las tarjetas de crédito,…
    • Don´t Retire – Que conecta con el contenido de este post…
    • Die Broke – La conclusión final del libro, sugiriendo que utilices el dinero en vida, en lo que consideres más importante, y que no estés preocupado por dejar herencias…

Es curioso que las opiniones plasmadas en este post, al enfrentarse con el pensamiento normal de la sociedad española, resultan chocantes. Nos han generado bastante debate y confrontación con buenos amigos. Parece que el habernos dotado de independencia y libertad de pensamiento al máximo, como hizo Don Quijote, nos esté ayudando a ver los problemas de una manera distinta a otros participantes.

Si te ha gustado este post, que sepas que es el primero de la serie El problema de la jubilación tiene solución que continua con La magia del interés compuesto y termina con Los planes de pensiones de empleo