¿Por qué la satisfacción en el trabajo es fundamental para OpSeeker?

Equipo de OpSeeker

He leído recientemente dos interesantes artículos en la prestigiosa revista británica The Economist sobre la importancia de la: satisfacción en el trabajo.

El primero es del 1 de agosto de 2019 y se titula, “Employee-happiness and business are linked”. Se basa en una encuesta realizada por Gallup sobre 1,9 millones de empleados, en 230 empresas distintas de 73 países.

El segundo, publicado el 22 de agosto de 2019, se titula, “How to keep your customers happy”. Se basa en una investigación que utiliza información recopilada sobre la satisfacción de los empleados por la web Glassdor sobre un total de 293 empresas, desde 2008 hasta 2018, y que después la correlaciona con la información del Índice Americano de Satisfacción de Clientes.

Este segundo artículo me resultó especialmente interesante porque mostraba la relación, centrándose en el sector servicios, entre satisfacción del empleado y satisfacción del cliente, la cual está a su vez correlacionada con el éxito financiero de las empresas.

Estas ideas son interesantes en si mismas y justificarían que desde OpSeeker las quisiéramos comentar con nuestros lectores. Pero, además, hay al menos dos motivos relacionados directamente con OpSeeker que me han llevado a escribir este artículo.

El problema de la jubilación…

El primer motivo está relacionado con el post que publicamos en 7 de octubre de 2016 titulado, “ El problema de la jubilación tiene solución: trabajar toda la vida”. En este post tratábamos de demostrar que, encarar la vida con la actitud de “trabajar toda la vida”, es la mejor manera de garantizarse prosperidad financiera (además de que cada vez salen más estudios a la luz sobre la correlación entre la jubilación y el deterioro cognitivo: “La jubilación anticipada puede acelerar el deterioro cognitivo“). Pero claro, para hacer sostenible esta propuesta, es necesario mirar al trabajo como un lugar en el que encontrar satisfacción vital, tal y como comentan los artículos de The Economist comentados previamente.

Para lograr esta satisfacción vital, lo ideal sería trabajar en una actividad que represente tu sueño vital, que te encante y que te llene de satisfacción. Es muy habitual escuchar a artistas, actores, escritores, médicos y otros profesionales, decir que su trabajo les encanta, que es su vocación. Obviamente en este caso, miel sobre hojuelas, seguro que no ven un problema en trabajar toda la vida, sino al contrario. Desgraciadamente, la mayoría de la gente no suele tener la sensación de trabajar en el lugar de sus sueños. El trabajo suele convertirse en el instrumento para ganarse la vida.

¿Quiere decir entonces que tienen que resignarse a estar insatisfechos y entonces ver la perspectiva de trabajar toda la vida como un losa insufrible? Yo creo que no debe ser así. Primeramente, nunca en la vida deberíamos renunciar a la búsqueda del trabajo de nuestros sueños. Esta búsqueda, durante toda la vida, ya podría dar motivos para no querer dejar de trabajar nunca. Pero, además, aunque el trabajo que tengamos que hacer sea tremendamente tedioso o poco agradable, si se encara con la actitud positiva correcta, se convertirá casi con seguridad en una fuente de plenitud vital.

Hay multitud de libros de psicólogos que demuestran esto incluso en situaciones límite como las que suponían los campos de concentración. Recomiendo el clásico, “El hombre en busca de sentido” de Viktor Frankl o “Flow: The Psychology of Optimal Experience” de Mihaly Csikszentmihalyi. Incluso para aquellos lectores que estos argumentos no les convenzan, quizá sea Freddy Mercury y su canción “We are the Champions” el que termine de inspirarles.

Vale la pena escuchar y leer despacio esta canción para descubrir que el momento de mayor clímax es cuando Freddy dice ,”… we are the Champions, my friends, and we´ll keep on fighting till the end…” es decir, pelear hasta el final, la perspectiva de morir con las botas puestas, es lo que realmente hace que la vida pueda vivirse con un entusiasmo total, absoluto. Incluso aunque sepas que tienes Sida, como Freddy, y que te vas a morir pronto. Brutal.

Voy a contar una anécdota personal que ayudará a ilustrar estas ideas. Hace unos meses fui a visitar a Boston a uno de mis hijos, que tiene 24 años y acaba de empezar a trabajar. La empresa le ha mandado allí y creo que a mi hijo le hace ilusión la oportunidad. Sin embargo, durante la visita, yo pensé que su día a día no debe ser fácil: vive solo, tiene que ocuparse de todas las tareas domésticas, trabaja muchas horas recluido en unas oficinas a las afueras de Boston, ya no tiene el equipo de futbol al que pertenecía en Madrid con sus entrenamientos y partidos los domingos. Vamos, que me dio la sensación de que podía caer en la peligrosa pendiente de la insatisfacción laboral/vital.

Como quería ayudarle durante mi visita, se me ocurrió una idea al visitar la famosa librería del museo de arte moderno de la Universidad de Harvard. Vi un libro con el título, “A Year In  Impressionism”, con cuadros alegres, preciosos y luminosos de Cezanne, Monet, Manet, Van Gogh,…

A Year in Impressionism
Amazon

El libro consiste en un cuadro para cada día del año. Decidí comprarlo y regalárselo a mi hijo, proponiéndole que todas las mañanas, antes de salir de casa dedicara un minuto para observar el cuadro del día, para trascender desde su situación vital, más o menos anodina, hasta el paisaje que observara. Para que disfrutara con el arte y con el colorido y con la vitalidad y con la creatividad de estos artistas. Para que aprendiera sobre impresionismo y sus artistas. Se lo dije, porque estaba seguro de que ese minuto soñando le llenaría todos los días el viaje en metro. Y muchas horas de trabajo más o menos sedentario.

Nuestro equipo

El segundo motivo para escribir este post esta relacionado con el propio equipo de OpSeeker.

OpSeeker Team
Gonzalo, Lucie, Carlos y Rafa

Desde 2016 cuando empezamos hasta hoy han logrado conseguir muchos éxitos: obtener premios nacionales e internacionales, desarrollar novedosas aplicaciones, colaborar con importantes instituciones financieras, ser seleccionados y premiados por importantes aceleradoras de empresas, obtener ayudas pública… sin embargo, el factor más importante de éxito es que todos ellos han trabajado con máxima satisfacción.

Seguramente están en la situación de trabajar en la empresa de sus sueños, que naturalmente es lo ideal. Pero también saben, que si OpSeeker se terminara y tuvieran que volver al mundo del trabajo corporativo más tradicional, más anodino, no sería un grave problema. Saben que el tiempo de OpSeeker siempre habrá sido provechoso y si en el futuro su trabajo no es tan “divertido”, mirarán la forma para encontrar su “libro de cuadros impresionistas diarios”. Para alegrarles cada mañana antes de ir a sus trabajos. Porque han aprendido que esa es la mejor forma de vivir una vida próspera tanto financieramente como vitalmente, “…fighting till the end…”